El flujo de trabajo en Wikku
Como se organiza la información en Wikku
Cada trabajo es único y viene definido por el cliente para el que lo realizamos, el producto que se personaliza y cada una de las tareas de personalización o manipulado que efectuamos.
Wikku nos permite almacenar de forma jerarquizada cualquier documento, imagen o video a nivel de cliente, trabajo o tarea. Por ejemplo, un Manual de Identidad Corporativa lo archivaríamos a nivel de cliente, una simulación o artes finales a nivel de trabajo y una foto del resultado final de cada una de las personalizaciones o trabajos efectuados lo pondríamos a nivel de su respectiva tarea.
Clientes
Cada cliente precisa su propia personalización. Por ello, cada trabajo viene en primer lugar definido por el cliente. Cuando el cliente final no es realmente nuestro cliente, Wikku nos permite organizar estos clientes finales por grupos, que se corresponderían con los intermediarios para los que trabajamos.
Productos
Un trabajo de viene también identificado por el producto y la variante exacta sobre la que trabajamos. Cualquier profesional de la industria sabe que ni todas las camisetas son iguales, ni todos los azules son idénticos y el cliente tiene además un sexto sentido especial para detectarlo.
Trabajos
Los trabajos representan la columna vertebral de Wikku donde confluyen cliente, producto y tareas. Como hemos dicho, cada trabajo es diferente y viene identificado por el cliente para el que lo producimos, el producto sobre el que operamos y las técnicas de personalización y manipulado que aplicamos.
Tareas
Por último, los trabajos se componen de tareas, donde cada una correspondería a las diferentes técnicas de personalización empleadas (serigrafía, bordado, DTF...) y/o manipulaciones (plegado, embolsado, arreglos, etiquetado...). Las propiedades de las tareas nos permitirán además concretar variables como tamaño, posición o número de colores.